La calidad del agua cambia drásticamente según su procedencia. No es lo mismo captar agua en una zona agrícola, en un área urbana, en un entorno montañoso o desde un pozo profundo. En Ruberte Tratamientos de Agua analizamos cada una de las captaciones para determinar qué tratamientos necesita realmente, evitando sobredimensionamientos y garantizando agua segura, estable y adaptada al uso previsto.
En este artículo te explicamos los principales tipos de captación y los factores que condicionan el tratamiento del agua en cada una.
1. Agua de pozo: variabilidad y necesidad de tratamientos específicos
El agua subterránea suele ser estable, pero también es donde más variaciones encontramos según la profundidad y la zona geológica.
Características habituales
- Dureza elevada (cal)
- Exceso de hierro o manganeso
- Turbidez puntual tras lluvias
- Nitratos en zonas agrícolas
- Posible contaminación microbiológica
Tratamientos recomendados
- Filtros de lecho para turbidez
- Equipos de descalcificación
- Filtros de desmineralización o eliminación de metales
- Sistemas de cloración o desinfección UV
- Regulación automática de pH
En Ruberte realizamos análisis previos para ajustar el tratamiento a la composición real del pozo.
2. Agua superficial: ríos, embalses y manantiales
Los recursos superficiales son abundantes, pero también los más expuestos a variaciones por clima, arrastres de tierra o actividad humana.
Características habituales
- Alta turbidez en lluvias o deshielo
- Materia orgánica
- Microorganismos
- Variaciones estacionales del pH
- Posibles restos agrícolas o urbanos
Tratamientos recomendados
- Filtración multietapa
- Carbón activo si hay materia orgánica
- Sistemas de desinfección
- Corrección de pH
- Monitorización continua de parámetros
Este tipo de captación exige sistemas más dinámicos y adaptables.
3. Agua de red municipal: estable pero no siempre apta para todos los usos
Aunque sea agua potable, los usuarios pueden necesitar mejorarla para consumo o proteger sus instalaciones.
Características habituales
- Tratamientos correctos pero agua dura en muchas zonas
- Cloro residual
- Sabor y olor
- Cal acumulada en tuberías y electrodomésticos
Tratamientos recomendados
- Descalcificación
- Osmosis inversa para consumo
- Prefiltros para mejorar sabor y olor
- Desmineralización según aplicación
Ideal para hogares, empresas y comunidades que quieren mayor confort y protección de equipos.
4. Agua en zonas agrícolas o ganaderas: impacto del entorno
Estas zonas presentan captaciones influenciadas por fertilizantes, nitratos y compuestos orgánicos.
Características habituales
- Nitratos y nitritos
- Elevada carga microbiológica
- Turbidez
- Posible presencia de pesticidas
Tratamientos recomendados
- Sistemas de desnitrificación
- Filtración avanzada
- Desinfección reforzada
- Equipos automáticos de control y dosificación
5. Zonas industriales: riesgo de contaminantes específicos
La cercanía a actividad industrial puede afectar al subsuelo filtrando minerales, metales o compuestos químicos.
Características habituales
- Metales pesados
- Sales minerales elevadas
- Compuestos químicos disueltos
- Variabilidad según el tipo de industria próxima
Tratamientos recomendados
- Filtros de eliminación de metales
- Resinas de intercambio iónico específicas
- Sistemas de osmosis o ultrafiltración
- Análisis periódicos para garantizar estabilidad
Elegir el tratamiento correcto empieza por conocer la captación
En Ruberte Tratamientos de Agua estudiamos:
- Tipo de captación
- Zona geográfica
- Composición real del agua
- Necesidades del cliente
Solo así podemos diseñar soluciones a medida, fiables y duraderas.
Desde filtración y descalcificación hasta sistemas completos de potabilización, adaptamos cada proyecto a la realidad de la captación para garantizar un agua segura y estable durante todo el año.
